Fábrica Levi Strauss en Ólvega (1989)

La Fábrica templo

La feliz conjunción entre carácter y circunstancias producen situaciones de entusiasmo y de una belleza indefinible.

Es en un momento concreto cuando a esa carga emotiva tan sugestiva y mística se superpone la necesidad del trabajo para todos tan ansiado y glorificado.  La fábrica “caída del cielo” llega como una aspiración social y una voluntad personal de acción de gracias.

El proyecto se carga entonces de un significado que impregna y domina sobre el resto de consideraciones.  Así la  respuesta arquitectónica nos habla de una visión unitaria fácilmente identificable, reposada y acogedora a la vez y con un gusto formal seco en el sentido clasicista del término.  Ha sido nuestro propósito construir una “fábrica templo” con vocación decididamente moderna y realizada con verdadera  artesanía tecnificada.