La Fábrica templo
La feliz conjunción entre carácter y circunstancias producen situaciones de entusiasmo y de una belleza indefinible.
Es en un momento concreto cuando a esa carga emotiva tan sugestiva y mística se superpone la necesidad del trabajo para todos tan ansiado y glorificado. La fábrica “caída del cielo” llega como una aspiración social y una voluntad personal de acción de gracias.
El proyecto se carga entonces de un significado que impregna y domina sobre el resto de consideraciones. Así la respuesta arquitectónica nos habla de una visión unitaria fácilmente identificable, reposada y acogedora a la vez y con un gusto formal seco en el sentido clasicista del término. Ha sido nuestro propósito construir una “fábrica templo” con vocación decididamente moderna y realizada con verdadera artesanía tecnificada.
- Escalera interior oficinas
Creación e identificación entre arquitectura y crecimiento económico.
Proyectos en fases desde 1956 hasta 1975. Terminación completa 3ª fase: 1977.
- Ladrillo. Hormigón y parámentos pintados.
- Gran sentido funcional.
- Estructura muy diáfana.
- Naves de trabajo de 2000 metros cuadrados. Con 40 metros de luz diáfanas
- Paramentos interiores con azulejo amarillo. Se ha cuidado esmeradamente el acabado y colorido.
La idea arquitectónica de este sólido semienterrado acoplado al terreno y con sus aristas de cubierta inclinadas siguiendo las rasantes perimetrales, se materializa con la construcción de muros de hormigón armado, y revestimiento ventilado de entarimado horizontal de tablas de pino tratadas, como referencia al material primordial base radical del concepto de la instalación: la madera